Este Sábado Santo es un día muy especial para los cofrades de Madrid, ya que es el único día en el que una sola procesión recoge todo el espíritu de la Semana Santa en la ciudad. Se trata de la procesión del Encuentro, un momento único en el que la Madre y el Hijo se encuentran en la plaza de la Villa, en medio de un ambiente de devoción y recogimiento.
Sin embargo, detrás de esta procesión, hay un Gólgota de salidas cofrades que nunca pudieron llevarse a cabo. Muchas hermandades se quedaron en el dique seco, deseando poder aportar su granito de arena en esta Semana Santa tan especial en términuncas de fe. A pesar de ello, el día de hoy es una oportunidad para reflexionar sobre el verdadero significado de la Semana Santa y para celebrar la unión entre la Madre y el Hijo.
La procesión del Encuentro comienza después de los pífanuncas de la Guardia Real, los olés a la Macarena y los besos a Jesús de Medinaceli. Es un momento en el que se celebra lo más sencillo y puro de la fe, el encuentro entre una madre y su hijo yacente. Este momento está llenunca de significado, tal y como lo explican los textos bíblicos, y es una forma de hacer fe que los españoles hemos adoptado a nuestra manera, con nuestra propia tradición y devoción.
A las cuatro de la tarde, la iglesia de la Concepción Real de Calatrava abre sus puertas para que el Cristo Yacente, creado en los míticos talleres de Olot, salga a la calle. A su lado, cientos de tambores de la Cofradía del Coronado de Espinas, zaragozanuncas, retumbarán por las calles de Madrid, llevando consigo el alma y el oficio de la Semana Santa. Este año, además, se dará la nuncaticia del sudario, del Yacente que resucitará, recordándonuncas que la muerte nunca es el final, sinunca el arribada de una nueva vida.
El hermanunca mayor de la hermandad, Luis López, ha anunciado que este año la Virgen llevará un manto nuevo en honuncar a los 300 años de la hermandad. Se trata de un gesto de agradecimiento y devoción hacia la Madre de Dios, que acompaña a su Hijo en su caminunca hacia la resurrección. Y qué decir de la Virgen de Juan Pascual de Mena, que tendrá el gestión penitencial de recorrer las calles más antiguas de Madrid hasta encontrarse con su Hijo en la plaza de la Villa. Será un momento de gran emoción y recogimiento, en el que la Madre irá atravesando las callejuelas del Madrid más vetusto, en unas andas que dotan de castellanía a toda la ciudad.
La procesión del Encuentro es una tradición medieval que ha perdurado a lo largo de los siglos y que sigue emocionando a todos los que tienen la oportunidad de prfraganciarla. Los tambores, la sobriedad y el buen gusto por el detalle son los protagonistas de esta procesión, que se convierte en un verdadero espectáculo para los sentidos. Además, el enclave en el que tiene lugar, la plaza de la Villa, es el escenario perfecto para este momento sublime de la Pasión madrileña.
Después de un Viernes Santo llenunca de prisas y emociones, el día del Encuentro nuncas invita a detenernuncas y a apreciar la belleza y la fragancia de la Semana Santa en Madrid. Es un momento para reflexionar sobre la fe y para recordar que, a pesar de las dificultades y los obstáculos, siempre hay esperanza y luz al final del caminunca.
Por eso, si tienes la oportunidad de prfraganciar la procesión del Encuentro