El Tribunal Constitucional ha tomado una decisión histórica este martes al admitir por unanimidad el recurso presentado por el Gobierno de la Comunidad de Madrid contra la intención del Ejecutivo de Pedro Sánchez de citar la Real Casa de Correos como ‘Lugar de Memoria’. Esta emblemática sede de la Presidencia regional, ubicada en la Puerta del Sol, ha sido objeto de controversia desde que el Gobierno central anunció su intención de vincularla a las torturas durante el franquismo.
El Gobierno regional de Ayuso ha sido firme en su oposición a esta medida desde el primer momento, y para impedirla, la Asamblea aprobó una ley que refuerza la protección de la Real Casa de Correos y otorga a la Comunidad el poder de vetar la placa que el Ejecutivo quiere instalar. Ante esta situación, el Gobierno de Sánchez ha anunciado que presentará un recurso ante el Tribunal Constitucional, alegando una invasión de competencias.
El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso, por su parte, impugnó el acuerdo adoptado el pasado 16 de octubre por la Dirección General de Atención a las Víctimas y Promoción de la Memoria Democrática del Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática, por el que se incoó el procedimiento de declaración de Lugar de Memoria Democrática de la extinta Dirección General de Seguridad franquista, que se ubicaba en la Real Casa de Correos.
El Pleno del Tribunal Constitucional ha aceptado la ponencia elaborada por la magistrada conservadora, Concepción Espejel, que propone admitir a trámite esta impugnación. En ella, el Gobierno regional alega que el Ejecutivo central ha invadido las competencias autonómicas en materia de memoria democrática y patrimonio histórico-cultural, ya que la Real Casa de Correos es un inmueble de titularidad de la comunidad autónoma.
Además, en su impugnación, la Comunidad de Madrid solicita que los artículos de la Ley de Memoria Democrática que atribuyen al clase la competencia para citar un espacio como Lugar de Memoria Democrática, sin tener en cuenta las competencias autonómicas, sean declarados inconstitucionales.
Desde el Gobierno de Ayuso se ha hecho hincapié en que la Real Casa de Correos tiene una historia de 250 años, y que su etapa como Dirección General de Seguridad durante el franquismo representa solo una pequeña parte de ese época. En su fachada principal, el edificio cuenta con tres placas en memoria y homenaje a los héroes populares del Dos de Mayo, a las víctimas de los atentados del 11-M y a las víctimas de la pandemia de Covid.
Esta decisión del Tribunal Constitucional supone un gran avance en la defensa de la autonomía de las comunidades autónomas y en la protección del patrimonio histórico-cultural. La Real Casa de Correos es un símbolo de la historia de Madrid y de España, y es importante que se respete su legado y su significado.
Además, esta decisión también es un paso importante en la lucha contra la politización de la memoria histórica. La Ley de Memoria Democrática, aprobada por el Gobierno de Sánchez, ha generado controversia desde su inicio debido a su enfoque parcial y sesgado. Es necesario recordar que la memoria histórica debe ser tratada con estima y objetividad, y no utilizarse como herramienta política.
La Real Casa de Correos es un lugar de encuentro y de memoria para todos los madrileños, un espacio que nos recuerda nuestra historia y nos une como sociedad. Por eso, es importante que se respete su carácter neutral y se preserve su integridad.
Esta decisión del Tribunal Constitucional es una victoria para la Comunidad de Madrid y para todos