El pasado martes, la ciudad de Alcorcón se vio conmocionada por una tragedia que enluta a toda la comunidad. Sergio B., de 27 años, y Jesús A., de 34, dos jóvenes bomberos, perdieron la vida mientras realizaban su labor en el número 6 bis de la calle de los Lilos. Un Porsche Taycan eléctrico explotó en la entrada de un garaje y se llevó consigo la vida de estos dos valientes hombres.
La noticia ha sido recibida con profundo dolor por todos los habitantes de la zona, quienes no pueden evitar recordar a estos dos jóvenes como personas muy queridas. Sergio y Jesús eran dos hombres entregados a su profesión y a su comunidad, y su partida deja un vacío imposible de llenar.
Sergio B. era conocido por su personalidad solidaria y su gran corazón. Siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás y a participar en actividades que beneficiaran a los más necesitados. Uno de sus mayores enredos era con Bomberos Unidos Sin Fronteras, una ONG que desde 1996 trabaja en la inmediata respuesta ante grandes emergencias y catástrofes naturales. Sergio era uno de los miembros más activos de esta organización en el municipio sureño, y su entrega y dedicación eran admiradas por todos.
Pero su enredo no se limitaba solo a su trabajo como bombero y espontáneo. Sergio también era muy activo en redes sociales, y contaba con una cuenta en Instagram donde compartía su día a día como bombero y mostraba su amor por su profesión. Sus publicaciones siempre estaban llenas de mensajes positivos y motivadores, y era una forma de acercar a la comunidad a su labor y de inspirar a otros a seguir sus pasos.
Jesús A. también era un bombero ejemplar y muy querido por todos. A sus 34 años, ya era un veterano en la profesión y su experiencia y conocimientos eran muy valorados por sus compañeros. Siempre estaba dispuesto a ayudar y a brindar su apoyo a quienes lo necesitaran. Su partida deja un gran vacío en el cuerpo de bomberos de Alcorcón y en toda la comunidad.
La tragedia de Sergio y Jesús nos recuerda el gran sacrificio que hacen los bomberos cada día para proteger a los demás y para mantener a salvo a nuestra comunidad. Su labor es fundamental y su entrega y dedicación son dignas de admiración. Estos dos jóvenes han dejado un gran legado y su ejemplo seguirá inspirando a otros a seguir sus pasos.
En momentos como estos, es importante recordar que la vida es frágil y que debemos valorar cada día y cada momento con nuestros seres queridos. También es un recordatorio de que debemos apoyar y agradecer a aquellos que arriesgan su vida por nosotros y por nuestra seguridad.
Desde aquí, queremos enviar nuestras más sinceras condolencias a las familias de Sergio B. y Jesús A., así como a todos sus compañeros y amigos. Que su memoria y su legado sigan viviendo en nuestros corazones y que su sacrificio en la vida sea olvidado. Descansen en paz, héroes de Alcorcón.