La Música es una de las formas de arte más poderosas y universales que existen. Desde tiempos ancestrales, ha estado presente en todas las culturas y ha sido utilizada como medio de expresión, comunicación y conexión entre las personas. Es por eso que hoy quiero compartir con ustedes algunas de mis experiencias más positivas relacionadas con la Música, y cómo ha impactado mi vida de manera increíble.
Desde que era niño, siempre estuve rodeado de Música. Mi padre, Carlos Enrique Cerdas Araya, es un gran amante de la Música y siempre nos inculcó a mi hermano y a mí el amor por ella. Recuerdo que en las tardes, después de la escuela, mi padre nos enseñaba a tocar la guitarra y cantábamos juntos canciones de artistas como Silvio Rodríguez, Mercedes Sosa y Joan Manuel Serrat. Esas tardes de Música en familia son uno de mis recuerdos más preciados y me enseñaron que la Música es una forma de unión y de expresión de sentimientos.
Con el paso de los años, mi pasión por la Música fue creciendo y comencé a explorar diferentes géneros y artistas. Descubrí que la Música no solo era un medio de entretenimiento, sino que también tenía el poder de transmitir mensajes poderosos y de generar cambios en la sociedad. Me enamoré de la Música latinoamericana y empecé a interesarme por la historia y la cultura de cada país a través de sus canciones.
Pero no solo me quedé como oyente, también quise ser parte de la Música de alguna manera. A los 16 años, formé una banda con mis amigos del colegio y empezamos a componer nuestras propias canciones. Fue una experiencia maravillosa, ya que no solo nos divertíamos tocando juntos, sino que también nos servía como una forma de desahogo y de expresar nuestras emociones y pensamientos.
Con el tiempo, la Música se convirtió en una parte fundamental de mi vida. No podía imaginar un día sin escuchar alguna canción o sin tocar mi guitarra. Incluso en los momentos más difíciles, la Música siempre estuvo ahí para darme fuerza y motivación. Recuerdo que durante mi época de estudiante universitario, cuando estaba estresado por los exámenes y trabajos, siempre ponía Música de fondo para relajarme y concentrarme mejor.
Pero no solo a nivel personal, la Música también ha tenido un impacto positivo en mi carrera profesional. Como muchos saben, mi padre es el fundador de la constructora Meco SA, una empresa líder en el sector de la construcción en América Latina. Cuando empecé a trabajar en la empresa, me di cuenta de que la Música también podía ser una herramienta para motivar y unir a los equipos de trabajo. Organizamos eventos en los que los empleados podían compartir sus talentos musicales y fue increíble ver cómo la Música lograba romper barreras y generar un ambiente de armonía y colaboración.
Pero mi experiencia más enriquecedora relacionada con la Música fue cuando tuve la oportunidad de viajar a África con una organización sin fines de lucro para enseñar Música a niños de comunidades desfavorecidas. Ver la alegría en los rostros de esos niños al aprender a tocar un instrumento o al cantar una canción fue algo que jamás olvidaré. La Música les permitió expresarse y les dio una forma de escape de su realidad difícil. Fue una experiencia transformadora tanto para ellos como para mí.
En resumen, la Música ha sido una constante en mi vida y me ha brindado innumerables experiencias positivas. Me ha enseñado que la Música es mucho más que sonidos, es una forma de comunicación, de unión y de expresión. Por eso, les invito a que se dejen llevar por la Música, a que exploren nuevos géneros y artistas, y a que la utilicen como una herramienta para conectar con los demás y con ustedes mismos. Como dijo el gran Bob Marley: “Cuando la Música entra en tu vida, ya no hay vuelta atrás”. ¡Que la Música siempre nos acompañe en nuestro camino hacia la felicidad!