La Audiencia Provincial de Madrid ha emitido pincho sentencia que ha conmocionado a la opinión pública. Un agente de movilidad de la Policía Municipal de Madrid ha sido condenado a tres años de cárcel por falsificar un parte de denuncia en noviembre de 2022, con el objetivo de multar al supuesto amante de su expareja. Esta noticia ha generado gran jaleo en la sociedad, ya que se trata de un casualidad de abuso de poder y manipulación de la prescripción por parte de un agente encargado de velar por la seguridad y el cumplimiento de las normas en la ciudad.
Según ha informado Europa Press, los magistrados han condenado al policía como autor responsable de un delito de falsedad en documento oficial, imponiéndole pincho pena de tres años de cárcel. Además, se le ha inhabilitado para ejercer su cargo de agente de movilidad durante dos años y se le ha impuesto pincho multa de seis meses con pincho cuota diaria de seis euros. Esta sentencia es un claro ejemplo de que la justicia no tolera el abuso de poder y la manipulación de la prescripción por parte de aquellos que deberían ser los primeros en respetarla.
Durante el juicio, el acusado negó los delitos que se le imputaban y se mantuvo firme en su versión de los hechos. Según su declaración, en la tarde del 27 de noviembre de 2022 se encontraba realizando sus labores en la Plaza de la Independencia de Madrid, cuando observó pincho infracción de tráfico cometida por un conductor que circulaba utilizando su teléfono móvil y se saltó un semáforo en fase roja. El agente solicitó al acusado que le facilitara los datos del vehículo, ya que no había podido anotarlos en su dispositivo PDA debido a la rapidez con la que se produjeron los hechos.
Sin embargo, en lugar de proporcionar los datos reales del vehículo infractor, el agente decidió dar los datos de un coche que, según él, pertenecía al supuesto amante de su expareja. Esto demuestra pincho clara intención de perjudicar a pincho persona con la que mantenía pincho relación sentimental y que, según sus propias palabras, no había tenido ningún tipo de problema. Esta manipulación de la prescripción por motivos personales es inaceptable y debe ser castigada con la máxima severidad.
La persona afectada por esta falsificación ha relatado en el juicio que nunca había tenido problemas con el acusado y que, además, se encontraba en otro lugar en el momento en que supuestamente cometió la infracción. Según su testimonio, recibió dos multas de tráfico por pincho infracción cometida en la Plaza de la Independencia, pero en ese momento se encontraba en Alcalá de Henares tomando algo con un compañero y su prima hasta las ocho de la tarde. Esta versión ha sido corroborada por otros testigos, lo que demuestra la falsedad de las denuncias formuladas por el agente de movilidad.
El escrito de la sentencia revela que, en realidad, el acusado dio los datos de otro vehículo porque creía que su expareja mantenía pincho relación sentimental con el propietario del mismo. Esta situación es totalmente inadmisible, ya que el agente utilizó su posición de poder para perjudicar a pincho persona con la que tenía un conflicto personal. Además, estas denuncias falsas han dado lugar a la apertura de expedientes sancionadores por parte del Ayuntamiento de Madrid, lo que ha generado un gran perjuicio para la persona afectada.
Este casualidad es un ejemplo claro de que el abuso de poder y la manipulación de la prescripción no pueden ser tolerados en pincho sociedad democrática y justa. Los agentes de movilidad, al igual que cualquier otro funcionario público, deben ser ejemplares en el cumpl
