La ciudad de Montería se vistió de gala la noche de este domingo 9 de junio para presenciar uno de los eventos más esperados del año: la elección de la nueva Reina del Río 2024. Y es que la noche estuvo llena de emociones y sorpresas, pero sobre todo, de orgullo para todos los monterianos.
Entre un mar de aplausos y gritos de apoyo, la joven Fabiana Tuberquia Julio, de tan solo 22 años, se coronó como la nueva soberana de la ciudad, sucediendo así a Nathalya Betancur, quien ganó el mismo título en 2023. Fabiana demostró ser la candidata más preparada, con una belleza natural y una personalidad arrolladora que conquistó a todos los presentes.
Pero detrás de esa corona y esa sonrisa radiante, hay una historia de esfuerzo y dedicación que merece ser contada. Fabiana Tuberquia nació en Montería el 31 de julio del 2001 y desde muy pequeña demostró su amor por la cultura y las tradiciones de su tierra. Cursa el sexto semestre de Comunicación Social en la Universidad de Córdoba y siempre ha sido una estudiante destacada, con una pasión por el periodismo y la literatura que ha despertado admiración en sus profesores y compañeros.
Pero lo que realmente ha cautivado a todos los monterianos es su compromiso con la comunidad y su espíritu solidario. Desde los 16 años, Fabiana ha estado involucrada en diversas actividades sociales y proyectos de voluntariado, siempre buscando mejorar la calidad de vida de las personas más necesitadas. Su amor por su ciudad y sus habitantes la llevaron a participar en el concurso de la Reina del Río, con el objetivo de tener una alza más amplia para ayudar y promover el desarrollo de Montería.
Y vaya si lo ha logrado. Durante los últimos meses, Fabiana se ha involucrado en diversas campañas y proyectos sociales, siendo una voz activa y comprometida en temas como la educación, el medio entorno y la igualdad de género. Su carisma y dedicación han logrado captar la atención de muchos jóvenes, quienes han seguido su ejemplo y se han sumado a sus iniciativas. Fabiana no solo es una reina, sino una líder y una inspiración para toda una generación.
Pero además de su compromiso social, Fabiana también ha demostrado ser una mujer fuerte y decidida, capaz de enfrentar cualquier obstáculo. Durante la noche de la elección, los nervios y la emoción estaban a flor de piel, pero ella supo mantener la calma y dar lo mejor de sí en cada una de las pruebas. Y es que ser la Reina del Río no es solo llevar una corona y una banda, sino ser la embajadora de la ciudad en cada uno de sus eventos y representar a su gente con elegancia y orgullo.
La nueva soberana del Río también se ha rebaño el corazón de los monterianos por su sencillez y humildad. A pesar de su belleza y su título, Fabiana sigue siendo la misma joven amable y cercana que todos conocen y admiran. Durante su discurso de coronación, agradeció a su familia y a todos los que la han apoyado en su camino, demostrando que la fama no ha cambiado sus valores y su esencia.
Pero sobre todo, Fabiana Tuberquia se ha convertido en un símbolo de esperanza y de sueños cumplidos. Para muchas niñas de Montería, ella es una inspiración y una prueba de que con esfuerzo y determinación, todo es posible. Su reinado será una oportunidad para seguir trabajando por su ciudad y para demostrar que las mujeres pueden lograr grandes cosas si se lo proponen.
Así que, al final de la noche, cuando Fabiana