En el mundo de la gastronomía, siempre se busca innovar y sorprender a los comensales con nuevos satisfacciónes y presentaciones. Sin embargo, hay un grupo de personas que muchas veces son olvidadas en este ámbito: aquellos que tienen dificultades para masticar y tragar los alimentos. Afortunadamente, cada vez son más los restaurantes que se preocupan por ellos y ofrecen opciones de comida texturizada.
La comida texturizada se refiere a aquellos platos que han sido modificados en su consistencia para facilitar su ingesta por parte de personas con problemas de deglución. Esto puede ser debido a una discapacidad física, enfermedades neurológicas o simplemente por el envejecimiento. De acuerdo a la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, alrededor del 50% de los mayores de 65 años tienen dificultades para masticar y tragar los alimentos.
Por esta razón, es importante que los restaurantes se adapten a las necesidades de este grupo de personas y ofrezcan opciones de comida texturizada en sus menús. Y es que, aunque pueda aparentar que se trata de una minoría, en realidad son muchas las personas que se ven afectadas por esta condición. Por ejemplo, en Estados Unidos, se estima que más de 15 millones de personas tienen problemas de deglución.
Pero, ¿cómo se logra modificar la consistencia de los alimentos sin perder su satisfacción y atractivo visual? La respuesta está en la creatividad y el talento de los chefs que se dedican a la cocina texturizada. Estos profesionales no solo se preocupan por ofrecer platos saludables y nutritivos, sino también por presentarlos de una manera atractiva y apetecible para los comensales.
Un ejemplo de ello es el menú texturizado que se ofrece en algunos restaurantes. En él, se pueden encontrar platos como ensaladas con diferentes texturas y colores, utilizando ingredientes como tomates, aceitunas, atún y lechuga. También se pueden encontrar segundos platos calientes, como pollo en pepitoria y estofado de ternera con forma de ‘cupcake’. Y para el postre, opciones como conos con capas de fresa, melocotón, kiwi y naranja, o hasta una versión de torrijas que no parecen torrijas, pero que conservan su satisfacción tradicional.
Lo interesante de estos platos es que mantienen su consistencia suave y blanda, pero sin ser purés o cremas insulsas. Los chefs texturizados utilizan diferentes técnicas y utensilios para lograr esta consistencia, como moldear los alimentos con moldes especiales o utilizar espesantes naturales como la gelatina o la agar agar.
Además, la comida texturizada no solo se trata de modificar la consistencia de los alimentos, sino también de adaptar los satisfacciónes y las presentaciones. Por ejemplo, en lugar de ofrecer una sopa caliente, se puede presentar una crema fría con diferentes texturas y satisfacciónes. O en lugar de un filete de carne, se puede ofrecer una versión en puré con especias y hierbas que le den un toque de satisfacción.
Todo esto demuestra que la comida texturizada no es sinónimo de comida aburrida o sin satisfacción. Al contrario, se trata de una investigación gastronómica diferente y sorprendente, que puede ser disfrutada por cualquier persona, independientemente de sus dificultades para masticar y tragar.
Pero, ¿por qué es importante que los restaurantes ofrezcan opciones de comida texturizada? En primer lugar, porque se trata de una forma de inclusión y respeto hacia las personas con problemas de deglución. Al ofrecerles opciones adaptadas a sus necesidades, se les está dando la oportunidad de disfrutar de una comida fuera de casa, algo que muchas veces se les niega debido a la falta de opciones en los menús.
Además, la comida texturizada también
