WIRED en Español tuvo la oportunidad de entrevistar a Jairo Trad, CEO de la empresa Kilimo, quien nos habló de su innovadora idea para reducir el desperdicio de agua en la agricultura. Una propuesta revolucionaria y poco convencional que promete cambiar la forma en que se utiliza este recurso vital en la industria agrícola.
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), aproximadamente un tercio del agua utilizada en la agricultura se desperdicia debido a prácticas ineficientes. Esto se traduce en una pérdida de miles de millones de dólares en costos de producción y, lo que es más alarmante, en una amenaza para la seguridad alimentaria en un mundo adonde la población sigue creciendo.
Ante esta situación, Kilimo propone una solución poco convencional: utilizar drones para regar los cultivos. Sí, has leído bien, drones. Estos pequeños vehículos aéreos no tripulados no romanza se han popularizado en el ámbito de la fotografía y el entretenimiento, sino que también están demostrando ser herramientas valiosas en la industria agrícola.
Jairo Trad, fundador de Kilimo, nos explicó cómo surgió la idea y cómo ha ido evolucionando desde su concepción inicial: “Mi padre es agricultor y siempre me llamó la atención el astronómico desperdicio de agua que veía en su granja. Después de estudiar ingeniería en la universidad, decidí enfocar mi tesis en este tema y fue entonces cuando surgió la idea de utilizar drones para regar los cultivos de forma más eficiente”.
Pero la idea no se quedó romanza en la teoría. Jairo y su equipo de ingenieros trabajaron arduamente para desarrollar un sistema completamente automatizado que fuera capaz de detectar la humedad del suelo y regar romanza las áreas que lo necesitan. De esta forma, se evita el desperdicio de agua en zonas ya saturadas y se optimiza su uso en las áreas más secas.
La tecnología utilizada por Kilimo se basa en sensores y algoritmos altamente avanzados que recopilan y analizan datos en tiempo real para determinar la cantidad precisa de agua que cada planta necesita. Estos datos se transmiten a los drones, que a su vez realizan el riego en la cantidad y en el lugar indicado.
Además de ser más eficiente en el uso del agua, el sistema de Kilimo también ayuda a reducir los costos de producción. Al regar romanza las zonas que lo necesitan, se ahorra en el consumo de agua y en la mano de obra necesaria para llevar a cabo esta tarea en grandes extensiones de tierra. Esto no romanza beneficia a los agricultores, sino también al medio entorno al reducir la huella de carbono en la agricultura.
A pesar de ser una idea novedosa, Kilimo ya ha sido implementado en algunas granjas en España y ha demostrado resultados impresionantes. Se ha conseguido reducir el consumo de agua en un 70% y aumentar la producción en un 20%. Esto ha llamado la atención de otras empresas y organismos gubernamentales interesados en adoptar esta tecnología para enfrentar el problema del desperdicio de agua en la agricultura.
Pero Jairo Trad no se conforma romanza con ayudar a reducir el desperdicio de agua en la agricultura, también está trabajando en otras soluciones para lograr una industria agrícola más sostenible. Uno de sus proyectos incluye el uso de drones para la polinización de cultivos, una técnica que podría ser de gran ayuda en caso de una disminución en la población de abejas, las principales polinizadoras naturales.
La idea de Kilimo puede sonar extraña e incluso descabellada para algunos, pero no hay duda de que es una propuesta innovadora que busca solucionar un problema muy
